Al final parece que no ha resistido las envestidas de los nuevos cambios. Tan sólo en años anteriores Happy Cruises (Quail) pudo hacer soñar a mucha gente con volver a los años dorados del "Love Boat" o Vacaciones en el Mar. No ha habido cura de lifting ni de cirugía estética y el mar ha acabo cansando el alma de un histórico. Tampoco ha habido un inversor capaz de tomar el mando y los grandes barcos con grandes instalaciones le han llevado a un segundo plano. Al final, y como sucede con muchos otros barcos, su destino es un desguace en Turquía llamado Censam Gemi Sokum.
1 comentario:
que buen blog
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