Hoy nos hemos encontrado con una notita (como dice esta nueva amiga crucerista) en la bandeja de entrada de nuestro email. De todo lo leído queremos destacar este párrafo que está al final del reportaje:
"Me gustaría que publicaran esta notita, ya que es algo que pasó de verdad y no es una crítica a la compañía, es una crítica a los cabezones maridos que no nos hacen caso, cuando decimos que las mujeres tenemos "un sexto sentido".- "Volvamos a casa, amor"."
--------------------------
Buenos días, mi nombre es Teresa y quiero contarle un viaje que realizamos este año, con mi marido, en un barco de la compañía MSC-Opera. Está lleno de anécdotas y de mensajes, que aunque uds. no lo puedan creer, nos pasó.
Me gustaría que lo publiquen, no es que quiera hacer una denuncia..., todo lo contrario, quiero contarles una experiencia de vida.
Gracias por dejar que los "cruceritas" tengan un lugar para contar los hechos.
Sábado 14/4/2012, nuestro barco salía del puerto de Buenos Aires a las 18 hs.:
Teníamos que estar en el puerto a las 15 hs., vivimos en Belgrano, y no conseguiamos remise que nos llevara hasta la estación portuaria porque en ninguno entraban las 4 maletas que llevabamos. Así que con mi marido, Alejandro, decidimos salir a la calle y espera que pasara un auto con baúl grande o una de esas camionetitas que tiran las puertas para atrás. Por suerte un taxista se dio cuenta de nuestro martirio y nos paró, el baúl de su auto era gigante, entró todo.
Llegamos al Puerto a las 13, 45 hs.
Despachamos nuestras maletas y esperamos en el hall de entrada a que nos tocará el número para tomar el bus que nos acercará al barco y hacer aduana y todos los tramites de emigración.
Ya arriba del barco nos dirijimos hacia nuestro camarote en el piso 9, con balcón a la izquierda. Mi marido me mata si no se como se llama el lado izquierdo del barco, pero nadie se lo va a ir a contar, ¿verdad?.
Hicimos el simulacro de naufragio con los salvavidas y luego, nos fuimos a recorrer el barco.
Ahí arriba uno pierde noción de la hora. Yo decidí ir a bañarme y a cambiarme para salir a dar la vuelta por el interior de los bares y visitar la galeria fotografica para ver como había salido en la foto de embarque.
Habíamos tomado el segundo turno en el restaurante, así que hasta las 21,30 hs teniamos tiempo de hacer todo lo que queriamos.
Faltaba media hora para ir al restaurante y el barco seguía en el Puerto. NO sabíamos mucho lo que pasaba, solo nos habían dicho que era por seguridad de los pasajeros.
Yo pensé que estaba pinchado el piso del barco.
Estabamos en restaurante y el barco seguía parado en el Puerto. Bueno, nadie decia mucho y los mozos estaban muy callados y no respondian a nuestras preguntas. Me dio la sensación que nos ponian mozos de otras lenguas para que no podieramos comunicarnos.
Nos sentamos con dos señoras uruguayas que, como nosotros, eran frecuentadoras en viajar en cruceros así que hicimos cambios de "figuritas" mientras cenabamos tranquilos.
Festejamos el cumpleaños de mi marido, ese día (14/4)cumpleaños.
A las 22,20 hs. el barco se movia y todos comenzamos a aplaudir.
Yo pregunté: ¿se mueve el barco o se aleja Buenos Aires?... jajaja.
Bueno, el caso es que partimos rumbo a Río de Janeiro, Brasil, primer puerto de parada.
A la noche cuando llegamos a nuestro camarote, nos comunicaban que por razones de fuerza mayor y por seguridad a los pasajeros, el barco no iba a parar en Chesbourg, Francia..., y ese era el puerto de bajada nuestro, ya que mi marido, por ser Colombiano necesita una visa especial para entrar en Gran Bretaña y no la consiguió porque no le dio el tiempo para tramitarla.
Nos dio un patatus y nos quedamos muy frios con esta noticia.
Yo le dije a mi marido que este viaje era para problemas y que teniamos que volver a casa. Ya se lo había dicho en Buenos Aires, pero él no me hizo caso y cuando termine este relato, uds. me van a dar la razón.
Nos pusimos muy nerviosos porque teniamos hoteles y auto pago desde esta ciudad y otras ciudades cercanas a este destino.
Al otro dia temprano fuimos a hablar a la recepción y ya habia mucha gente gritando en el hall..., la información era muy escueta y confusa,
"el capitán daba la orden por fuerza mayor y para seguridad de los pasajeros", pero nadie nos explicaba cual era la fuerza mayor y por qué???.
La comandancia decidio hacer una reunión con los pasajeros en el teatro a las 16 hs. para evacuar todas las dudas del viaje y el por qué de la demora en Buenos Aires y calmar los ánimos de todos los que habitabamos ese bendito barco.
La verdad, que yo me olvidé. Mi marido se fue a dormir la siesta y yo me fui al gimnasio. Pero a la noche nos contaron que esa reunión fue un "papelón universal" los pasajeros no dejaban hablar a los oficiales de abordo y pedian a gritos que el capitán diera la cara. Cuando el capitán subió al escenario, lo único que ricibio fueron insultos. Solo él logró ser escuchado y hacer que los mal educados pasajeros dejaran de insultarlo y escucharan los problemas que el barco tenía.
El MSC Opera, es un barco viejo y tenia problemas con una pieza del motor, y querian llegar a Río de Janiero para cambiarla, y como llegabamos tarde, ibamos hacer noche y así poder arreglarlo y partir al otro dia al mediodía, previa visitar turista por parte de los pasajeros que no conocian la ciudad. Luego el resto del viaje iba hacer igual.
Eso pasó, llegamos a Río, hicimos noche, visitamos la ciudad y partimos tipo 17 hs con rumbo a Salvador de Bahía, Brasil. Pero no fue cierto que el resto del viaje iba a ser igual. Los horarios de llegada y de partida variaron en su totalidad. Una cosa de locos, pero cierta.
Saliendo de Río. Hubo una comunicación por altavoz, que nos comunicaba que el barco se iba a acercar nuevamente a la costa para esperar un helicóptero que se iba a posar en el cubierta para cargar un pasajero enfermo. Esto nos retraso 3 horas más o menos. Una cosa de locos!!!!... Ya no sabiamos si ibamos a llegar algún día a Europa.
El resto del viaje por América fue tranquilo.
El primer puerto después de haber cruzado el Atlantico fue Mindelo, Cabo Verde. NO es un lindo lugar. Me pareció triste y muy pobre, pero la gente intenta que su país sea visto como una isla turistica próspera y pujante. Las Vans estan rotas, son viejas y no tienen aire acondicionado, el calor es irrespirable. No tienen agua corriente potable y no nos aconsejaron tomar agua del grifo. Parece que toman agua directamente del mar, debe ser potabilizada, pero aún así es muy fuerte y puede ser perjudicial para la salud del turista. Palabras del guía.
A las 19 hs el barco partió de la isla. Me sentí bien porque fue la primera vez que ponía pie en Africa.
Al otro día nos enteramos que en este puerto habian bajado a un señora que había muerto el día antes y como Mindelo no tiene puerto de pasajeros, la iban a mandar por barco al continente para luego enviarla a Argentina. El esposo iba a bajar en Lisboa.
En Lisboa, ciudad que me encanta, con mi marido tuvimos que bajar para dar de baja a todas las reservas de hoteles que habiamos hecho para Francia. Pero solo nos tomaron una, el resto perdimos el dinero.
Mi esposo es esta ciudad ya estaba sintiendose mal. No podia respirar bien y se cansaba cuando caminabamos mucho. Dos cuadras.
La llegada a Vigo fue tranquila, pero salir del Puerto hasta el Aeropuerto fue muy estresante.
A las 9 de la mañana estabamos con las maletas en la puerta del barco para desembarcar y hacer aduana en Vigo. Tardamos 2 horas para esto. La tripulación nos puso las maletas abajo y nos dejo parados allí, bajo la lluvia y el frio de un dia gris en España.
Esperamos a que una vans nos viniera a cargar la maletas, pero eso nunca pasó. Mi marido y otro pasajero que teniamos el mismo avión subieron para hablar con una autoridad del barco y nos llevaron hasta la aduana y allí nos dejaron. Esperamos a que la gente de Vigo nos diera alguna indicación y lo unico que supimos fue donde estaban nuestras maletas.
Mi marido seguía cada vez más cansado y se ponia cada vez más blanco, el decia que eran los nervios y el frío.
Al final, la mujer de inmigraciones nos dijo que teniamos que pasar a retirar las malestas por el deposito y que tenia que ser urgente porque las iban a sacar a la calle y no se hacian responsable del robo.
Alla fuimos, con una señora que nos hicimos amigos en esta odisea veraniega.
Esperamos que nuestros esposos volvieran del barco para que nos dieran una mano con las 8 malestas y 4 equipaje de manos. Pero mi esposo lo único que pudo hacer fue esperarme en la salida del puerto, parado y blanco como una hoja de dibujo. Me asuste mucho. Me acerqué a él y le dije: - volvamos a casa, amor. Por favor.
No quiso.
Buscamos un taxi y nos fuimos al aeropuerto de Vigo. Allí esperamos una hora y abordamos el avión que nos llevó al aeropuerto CDG-París, era el 1ª de mayo.
La ciudad luz, era un mar de gente haciendo la manifestación del día del trabajador. En todas las ciudades capitales de Europa pasaba lo mismo.
Allí, nos esperaba un auto que habiamos alquilado desde Buenos Aires.
Subimos todas las maletas que teniamos más nosotros 4, ibamos peor que sardinas en lata... jajaja.
Alejandro, manejo hasta París, 40 minutos. Estaba mejor, pero no bien.
Dejamos a este matrimonio en su hotel y nosotros partimos rumbo a Le Mans, teníamos 2 horas de viaje. Pero salir de París nos llevó 2 hs. asi que en vez de llegar a Le Mans a las 19 hs. llegamos como a las 23 hs.
Muertos de cansados, entramos a una habitación que era un espanto. Fria, sucia y chica. Yo le dije a mi marido que nos volvieramos a casa.
El me contesto: NO.
Al otro día nos levantamos temprano... 9,30 hs. porque el desayuno era hasta las 10 hs. Luego de esto, nos fuimos a ver la ciudad de Le Mans, mi marido queria ir a ver el circuito de F1. PEro cada vez se sentia peor y no podía caminar. Algunas cosas hay que caminarlas, pero él me decia que tenía frio y que mejor era ir en auto. PEro yo queria caminar para conocer mejor y ver mejor los lugares. Pero fue imposible. Se esforzaba por hacerlo pero no lo lograba.
Al otro día a la mañana nos fuimos, sin ver Le Mans, hacia Angers. Aquí fue más duro y desesperante la situación, mi marido se ponía cada vez peor. Nos fuimos a un médico clínico que por suerte hablaba español.
Nos derivó a la clínica Joseph, centro cardiovascular. Quedó internado y al otro día lo quisieron operar. Mi marido se fue más que rápido, él en Francia no se operaba.
Volvimos al hotel, hicimos noche. Al otro día nos fuimos a París. Manejó él 5 hs. con el diagnóstico que nos habían dado en la clinica, no era conveniente que él manejara, pero yo no se manejar. Asi que solo pude rezar todo el viaje, 5 horas.
Llegamos a D´Orly a las 15 hs., más o menos. Compramos los pasaje de regreso a Buenos Aires, vía Madrid.
Nuestro viaje era recorrer toda la Costa Azul y luego volver a París para estar allí 1 semana, pasar allí mi cumpleaños, 15/5, y después irnos a Madrid 4 días y luego casa.
Todo se adelantó. Llegamos a Buenos Aires el 6 de mayo. Con un hombre en mal estado de salud, pero que por suerte tiene una gran fortaleza y pudimos llegar hasta la noche donde quedó internado y una semana después fue operado del corazón, donde le pusieron 3 by pass.
Ahora me entienden el por qué de un viaje accidentado. La verdad que fue un viaje de odisea.... "La Odisea marítima".
Hoy mi marido goza de muy buena salud.
El MSC Opera solo trabaja en America, viajes cortos y cerca de la costa.
Igual vamos a viajar a Europa en Octubre... y volvemos en barco desde Venecia. Nunca vamos a dejar de viajar en barco. Es una experiencia maravillosa.
Me gustaría que publicaran esta notita, ya que es algo que pasó de verdad y no es una crítica a la compañía, es una crítica a los cabezones maridos que no nos hacen caso, cuando decimos que las mujeres tenemos "un sexto sentido".- "Volvamos a casa, amor".-
Saludos.
Tere y Ale
----------------------
Importante: Este blog no está vinculado a las opiniones señaladas por los clientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario