DISNEY DREAM: UN BARCO DE ENSUEÑO

Hace unos días comentamos nuestra experiencia en Disney World y añadíamos un enlace al excelente reportaje de nuestro colega Félix de Inforcruceros sobre el Disney Dream. Pero, como es lógico, también queremos dejar nuestro granito de arena a modo informativo de lo que pensamos sobre ese barco que, sin duda, ha resultado ser una gran y grata sorpresa para nosotros. 

Barco

Tiene una imagen imponente y diferente. No sólo por sus colores corporativos, perfectamente identificables con Mickey (rojo, negro, blanco y amarillo) sino por su bonita silueta, su afilada y a la vez redondeada  popa con el gracioso detalle de personajes de Disney. 

Este barco esta lleno de detalles comenzando por la recepción, que ya te aplauden nada más entrar. Te sientes un privilegiado nada más llegar. Con esto ya nos damos cuenta que el resto del crucero va a ser similar. Esta primera recepción tiene lugar en el Atrium Bon Voyage, muy moderno con una decoración exquisita con tonos dorados y maderas. No parece ser un barco americano. Mucho gusto, con muchos detalles y, sobre todo, con mucha amplitud. En el centro una escalera, una lámpara de Swarovski, y la figura esencial del barco Pato Donald. Aquí es dónde los personajes de Disney suelen tener encuentros con todas las familias.

Instalaciones
Este es uno de los puntos fuertes del barco. Imposible aburrirse o encontrar un rincón para descansar y tomar algo. Si queremos diversión tenemos la zona de las piscinas y las instalaciones para menores; y si preferimos relax la zona de adultos.

Piscinas

Hay dos piscinas principales Donald y  Mickey en el centro del barco en cubierta 11 (se cierran cuando hay espectáculos). Aquí mismo está la zona Nemo Reef para los niños pequeñitos con chorros de agua. Desde la cubierta 12 se accede al AquaDuck con el tobogán gigante que cruza todo el barco y que se accede por una de las chimeneas. Es la zona especial para menores. Aquí se encontran los surtidores self-service de bebidas gratis (agua y refrescos) y helados.

Zonas menores

Es un sueño para ellos. El mejor barco del mundo y con las mejores instalaciones, sobre todo porque son para su uso y disfrute, y los padres no tienen por qué acudir a "rescatarles". La cubierta 5 es suya al completo. Para los bebés de 3 meses a 3 años cuentan con la guardería "It´s a Small World Nursery", el "Oceanner Lab" y el "Oceanner Club"  para niños de 3 a 12 años, y el Vibe para adolescentes que ocupa la proa... impresionante!!. En otras cubiertas tienen el club Edge o la zona de juegos Arr-cade.

Zonas adultos

Si había dudas de que fuera un barco para adultos, Disney nos da una razón para ir. En la cubierta 11, detrás de las piscinas de niños, se encuentra la zona Cove, con una piscina, jacuzzi, dos bares (Cove Bar y Cofe Café), zona de relax y zona fumadores, además del bar Currents en cubierta 12. 

Hay otra zona de fumadores llamada Outdoor Lounge en la cubierta 4. Y hay que añadir la gran zona solarium en cubierta 13, que es donde está la Concierge Private Sundeck para los clientes de Suite. Lógicamente, está también el Senses Spa en este mismo lugar, donde hay una zona de espera muy elegante.

Teatros

Estan especial el barco que en vez de tener un teatro han querido hacer dos. El Walt Disney Theatre se utiliza para las grandes sesiones de espectáculos, y el Buena Vista Theatre para el cine o cine 3D. Es el cine más grande que hemos visto en un barco de crucero. Una auténtica sala como en una ciudad.

Bares

Siguiendo la línea de diseño del barco, los bares tienen un diseño y una decoración digna de barco de lujo. Nos ha gustado especialmente el Meridian en cubierta 12 con dos salidas al exterior (una de ellas fumadora), y el Champagne Bar con sus tonos rosados. Eso sí, igualmente modernos son el Skyline Lounge, el Evolution, el Pink, el District Lounge o el 687, todos en la zona District de la cubierta 5 en popa.

Restaurantes

La zona más común para comer era el buffet Cabanas (cubierta 11) con vistas a estribor, a babor y a popa. Muy grande y con gran variedad de comida, incluido algo de marisco. El Animators Palate ha sido el restaurante más animado de todos. Lo decimos porque es un restaurante "interactivo" lleno de pantallas de televisión gigantes donde cada día realizaban y "televisaban" animaciones diferentes. Sinceramente, muy  ingenioso y novedoso. El Enchanted Garden es como estar en un jardín, con un decorado de rejas en el techo y flores. Muy bonito y original. El otro gran restaurante es el Royal Palace, el más elegante de los tres gratuitos. No pudimos cenar en él por falta de tiempo. Al que sí pudimos acudir fue al Palo, en cubierta 12. Junto al Remy son los dos de pago. Son la exclusividad que el barco debe tener para clientes que quieren comida superior y un ambiente personalizado. Mucha clase y elegancia. Un detalle que nos ha dejado boquiabiertos ha sido que a aquellos que llevan traje oscuro les dan una servilleta oscura. Es la primera vez que nos sucede. Una cosa que nos ha gustado mucho es la organización a la hora de sacar las comidas. Nos ha parecido que no hay aglomeración entre los camareros.

Espectáculos

Si nos hacemos una idea de lo que es Disney en cualquiera de sus parque, sus espectáculos quedan perfectamente reflejados en el barco. Impresionantes por la puesta en escena, por la variedad y por la coreografía. Todo gracias a que la compañía cuenta con una productora propia y verdadeos actores. Todo se realiza en el Walt Disney Theatre. No obstante, algún espectáculo se queda para realizarlo en la zona de piscinas al aire libre, que suele terminar con una sesión de fuegos artificiales. Esto no se vé en ningun otro barco. A todo ello, se une que los personajes de Disney están siempre recorriendo el barco para divertir a y hacerse fotos con los más pequeños.

Camarotes

Al estilo de la naviera y, sobre todo, amplios. Algo muy acertado porque viajan muchas familiar con niños. Destacable que el baño y el WC eran totalmente independientes. Y, un detalle interesante, los camarotes interiores (para no parecer interiores) cuentan con un ojo de buey que es una pantalla de TV, que cuando está atracado en puerto muestra imágenes de la webcam y en navegación tiene animaciones. Además, se puede decorar el camarote y la puerta del camarote. 

Servicio a bordo

Tanto la atención a bordo como el servicio a bordo son, desde lo que hemos vivido y sentido, inmejorables. La perfección no existe, pero a nosotros nos lo ha parecido. Los asistentes del camarotes siempre con gran profesionalidad y con una gran rutina de trabajo, los camareros del restaurante impecables y con sentido del humor, y los camareros de los bares muy atentos y sin atosigar para vender.

No nos olvidamos de las tiendas para niños y padres (donde gastamos mucho...).

En definitiva, se trata de una naviera especial y como tal hay que  valorarla, tanto en calidad como en precio. Si algo es bueno se debe pagar porque el retorno de la experiencia es siempre satisfactorio.Y, la fiesta de piratas ha sido genial !!!